A partir del sábado 1 de abril de 2023, los franceses podrán volar a Corea del Sur sin realizar ningún trámite administrativo. La autorización de viaje electrónica (K-ETA), que actualmente debe solicitarse antes de la salida en el sitio k-eta.go.kr, ya no será necesaria para los ciudadanos de 22 países, incluidos Francia, Bélgica y Canadá, dice el sitio Visanews. . Esta exención aplica hasta el 31 de diciembre de 2024.
El K-ETA, el equivalente coreano del American Esta, se solicita normalmente a nacionales de 112 países para estancias inferiores a 90 días. Cuesta 10.000 wones, o 7 €, y tiene una validez de dos años. Los 22 países que pronto estarán exentos fueron elegidos debido a la tasa “bastante baja” de denegación de entrada. Los viajeros que ya tengan un K-ETA podrán continuar usándolo hasta su fecha de vencimiento, pero no podrán obtener un reembolso.
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Esta medida temporal es parte del programa «Visita Corea Año 2023-2024» destinado a impulsar el número de turistas después de la pandemia de Covid-19. Corea del Sur, un destino impulsado por el K-pop y el efecto “Netflix-Drama”, apunta a 10 millones de visitantes extranjeros en 2023, es decir, tres veces más que en 2022 (3,19 millones).
En el sitio, no están vigentes más restricciones relacionadas con Covid-19. La obligación de llevar mascarilla en interiores se eliminó el 30 de enero de 2023 (excepto en el transporte público) y las pruebas de detección antes de la salida ya no son necesarias desde octubre de 2022.
