Blutch ha vuelto a recurrir a sus recuerdos de la infancia para inventar una aventura sobre uno de los héroes clásicos del cómic. Después de haber ofrecido, junto con su hermano Robber, una relectura talentosa y conmovedora del tándem Tif y Tondu, creado en 1938 por Will y Rosy en Le Journal de Spirou, el autor aborda el legendario Lucky Luke.
Paralelamente a la serie clásica retomada por Jul y Achdé, rinde un alegre homenaje al “vaquero solitario” con Les Indomptés. Una relectura que presenta a Lucky Luke enfrentado a la descendencia infernal de una familia de bandidos. Formados por el mayor Rufus, buscado por las autoridades, el menor Casper y la menor Rose, los hermanos no obedecen ninguna regla y le causarán muchos problemas. Después de haber encarcelado al Rufus mayor que intentó robarle Jolly Jumper, se encontrará manejando a los dos más jóvenes. El valiente vaquero se convierte entonces en niñera, tarea en la que está lejos de sobresalir. En cuanto a los padres, dos sinvergüenzas que desaparecieron con el enorme botín de un atraco bajo la barba de su cómplice Grubby Feller al frente de una banda de desesperados que los perseguían sin descanso, no tiene sentido ver allí ningún apoyo.
Para Blutch, revisitar el mito de Lucky Luke es una “tarea delicada”, porque “al tiempo que le infundía mi propio temperamento, mis temas y motivos favoritos, intenté permanecer fiel al espíritu de Morris y Goscinny”, confía el autor en una entrevista con los editores transmitida en un comunicado de prensa. Un gran desafío que logró con talento. En una historia rica en giros y ritmo frenético, el lector estará encantado de redescubrir el espíritu poco convencional de la saga humorística de los villanos ineptos (aquí la banda de matones liderada por Grubby Feller de L’Escorte publicada en 1968) , o los sabrosos comentarios de Jolly Jumper. Sin olvidar la sacrosanta y demoledora pelea de salón brillantemente ilustrada.
El público quedará igualmente encantado al descubrir al héroe de su infancia maltratado y abrumado por niños abandonados a su suerte, totalmente indisciplinados e inadaptados a la buena sociedad que los rechaza descaradamente. Ante la irreverencia de esta mala semilla, incluso el sheriff pierde todo sentido moral, intentando perderlos en el bosque, “obligado a ceder a la presión popular”, como él dice. Impulsado por su infalible humanidad, Lucky Luke no se atreve a abandonarlos y se expone a momentos verdaderamente divertidos e hilarantes. El autor dedicó Les Indomptés a sus tres hijos. Atravesado por sus recuerdos, el álbum entrelaza referencias al mito y una dimensión más personal. “Debí dibujar a Lucky Luke por primera vez cuando tenía cuatro o cinco años. Así que puedo decir que lo dibujo desde hace unos cincuenta años, dijo Blutch a la AFP. Llevaba mucho tiempo madurando dentro de mí. Que estaba en una emboscada, que sólo estaba esperando salir… Para nuestro mayor deleite.
The Untamed, homenaje a Lucky Luke visto por Blutch, Lucky Comics, 13 euros.