El Livret A y el Livret de développement durable et solidaire (LDDS) continuaron en julio su impulso récord para este año, anunció el martes la Caisse des dépôts (CDC), a pesar de la congelación de la tasa de remuneración al 3 % decidida por Bercy.
La diferencia entre depósitos y retiradas (entradas netas) el mes pasado de estos dos productos de ahorro regulados emblemáticos ascendió a 3.130 millones de euros, un récord para un mes de julio, hasta alcanzar un total pendiente de 547.400 millones de euros, algo inaudito también aquí. Esta vez fue el LDDS el que impulsó el aumento de las entradas netas, registrando un mes de julio récord (970 millones de euros).
Los buenos resultados del Livret A (2.160 millones de euros) permiten que el importe acumulado alcance un récord tanto en julio como en el total desde enero. Los folletos Livret A y LDDS han aumentado 37,67 mil millones de euros (7,4%) desde principios de año, algo inaudito. A este ritmo de recaudación, podrían superar el año récord de 2012, impulsado en su momento por la elevación de los límites máximos.
El flamante año actual se explica en particular por Livret A: se avecina un tipo de interés de al menos el 3%, el primero desde 2009, y una débil competencia por parte del fondo de seguros de vida del euro. Por lo tanto, mantener el tipo en el 3% el 1 de agosto propuesto por la Banque de France y validado por Bercy el 13 de julio, en lugar del 4,1% previsto según el método de cálculo, no ha disminuido el interés de los ahorros regulados el mes pasado.
Por otra parte, llamó la atención del profesor asociado de las facultades de Derecho de la Universidad Panthéon-Sorbonne, Paul Cassia, que presentó un recurso ante el Consejo de Estado el 13 de julio. Su solicitud solicita la anulación total de la decisión de Bruno Le Maire, ya que cuestiona el concepto de «circunstancias excepcionales» esgrimido por el Banco de Francia para justificar el redondeo del tipo a la baja.
Gestionadas conjuntamente por la Caisse des dépôts et consignations (CDC) y las redes bancarias, las cuentas de ahorro Livret A y LDDS financian viviendas sociales, pymes, pero también la transición energética y la economía social y solidaria (ESS).