El Bayern de Múnich se ha estado moviendo lentamente desde la reanudación. En un choque en lo más alto de la tabla de la Bundesliga, el club bávaro no pudo hacerlo mejor que un empate 1-1 contra el Eintracht Frankfurt. Pasan las semanas y los partidos pero los problemas siguen para el Bayern. Una vez más, los bávaros no supieron crear suficiente peligro y no tuvieron muchas situaciones frente a la portería de Kevin Trapp. La segunda mitad pudo incluso ser preocupante ya que la posesión fue estéril durante 45 minutos.
Sin embargo, el Bayern, durante la primera parte, había acotado la rotura con el gol de Leroy Sané, a la media hora de partido (35º) con un remate de derecha. Incluso el Bayern podría haber marcado otro gol sin la brillante doble atajada de Kevin Trapp (31′). Pero el Bayern actual depende demasiado de las hazañas individuales para ampliar la brecha. Y Franckfort supo aprovecharlo.
Franckfort supo gestionar la posesión bávara y explotar al contraataque, apoyándose sobre todo en la velocidad de un muy buen Kolo Muani. Fue el francés, bien servido por Kamada en un contraataque, el que permitió a su equipo remontar para marcar (70′) y conseguir el empate. El Bayern no supo poner más intensidad al final del partido y se contentó con rotar frente a la superficie como en el balonmano.
Signo de impotencia, los hombres de Julian Nagelsmann enmarcaron solo un disparo en la segunda mitad. El técnico alemán tiene, por tanto, trabajo por delante y deberá encontrar las claves para relanzar a su equipo antes del partido ante el PSG del próximo 14 de febrero. En Liga, el Bayern sigue líder pero los tres empates consecutivos han derretido la ventaja sobre los perseguidores. Los muniqueses tendrán que lanzar su año 2023 antes de que sea demasiado tarde.