“Practicado con seriedad, el deporte no tiene nada que ver con el juego limpio. Desborda celos odiosos, bestialidad, desprecio por todas las reglas, placer sádico y violencia; en otras palabras, es la guerra, menos las armas”, dijo George Orwell. En este caso, Luka Lochoshvili hizo bien en carecer de seriedad. Este lunes 27 de febrero, el georgiano de 24 años recibió el Premio FIFA Fair Play en la ceremonia “The Best” por salvar la vida de un oponente en medio de un partido.

El 27 de febrero de 2022, casi un año del día, Luka Lochoshvili -entonces de 23 años- disputó un partido de la liga austriaca con su club, el Wolfsberger AC, contra el Austra Viena. Durante el partido, Georg Teigl recibe sin darse cuenta un rodillazo en la cabeza. El jugador se derrumba, inconsciente. Mientras unos seguían jugando, mientras otros miraban atónitos, Luka Lochoshvili aceleró, olvidándose por completo del fútbol, ​​para salvar la vida de su oponente. El georgiano no dudó en mover la lengua de Georg Teigl, no sin dificultad, para que este último pudiera respirar. El jugador del Austra Vienna Victim, que sufre una fractura craneal y una ruptura de la mandíbula y el arco cigomático, será posteriormente evacuado del campo.

“Por suerte, sabía qué hacer. Cualquiera hubiera hecho lo mismo en mi lugar. Creo que solo logré atrapar su lengua en el último momento. Es un gran honor para mí, me gustaría agradecerles por este premio. Estoy muy feliz, pero aún más feliz de haber podido salvar la vida de Georg. Lo más importante en el fútbol es el juego limpio y el respeto”, declaró Luka Lochoshvili, el héroe del año.