Los países miembros de la Unión Europea llevan 11 horas votando la propuesta de la Comisión para autorizar el uso del controvertido herbicida durante 10 años más. Su aprobación vence el 15 de diciembre. Francia acaba de abstenerse. “No estamos en contra del glifosato pero su uso debe limitarse a los casos en los que no existen alternativas”, afirma el Ministerio de Agricultura y Soberanía Alimentaria. Lo que propone la Comisión no es apropiado y por eso Francia se abstiene. Y recordar que Francia había reducido el uso de esta controvertida molécula un 27% en cinco años. «Hemos demostrado que es posible reducir su uso buscando otras prácticas agrícolas y apoyando a los agricultores», continúa rue de Varenne. Salvo sorpresas de última hora, según el Ministerio de Agricultura, nos encaminamos hacia la “no opinión”, es decir, una decisión sin mayoría cualificada (el 55% de los Estados miembros que representan el 65% de la población europea) para o contra el texto de la Comisión. Este último deberá revisar su copia y presentar un nuevo documento en el plazo de un mes durante un Comité de Apelación. “Esperamos que en este nuevo texto se tenga en cuenta la posición de Francia que solicita la supervisión de los usos del glifosato y un estudio que muestre sus consecuencias sobre la biodiversidad”, aseguramos en París.