Sabemos un poco más sobre los efectos potenciales de la reforma del seguro de desempleo deseada por el gobierno. Esto podría afectar hasta a un tercio de los beneficiarios, según evaluaciones de algunas de las medidas previstas por el ejecutivo para revisar las normas de compensación a los demandantes de empleo, según un documento interno de la Unedic. Si bien el Gobierno aún no ha formalizado sus opciones, el organismo responsable de gestionar este plan ha distribuido internamente un estudio que estima el impacto de diferentes escenarios en los beneficiarios y en el gasto, según supimos el sábado de fuentes fiables.
En este documento, revelado por Le Monde y del que la AFP obtuvo una copia, hasta un tercio de los beneficiarios se verían afectados si el Gobierno decidiera endurecer las condiciones de concesión de derechos. A finales de marzo, el Primer Ministro Gabriel Attal enumeró tres posibles palancas para reformar el seguro de desempleo: duración de la compensación, nivel de la compensación y condición de afiliación, es decir, el tiempo que uno debe haber trabajado para ser compensado. Sobre este último parámetro, entre las vías mencionadas está el hecho de que será necesario haber trabajado nueve meses en los últimos dos años, y ya no seis.
Según el documento interno de la Unédic, el 11% de los beneficiarios se verían afectados por un aplazamiento del derecho si esta duración se ampliara a siete meses y el plan ahorraría 400 millones de euros al año. La proporción aumentaría al 31% si la duración se ampliara a doce meses, lo que supondría un ahorro de 2.300 millones de euros. El impacto sería aún mayor si el ejecutivo decidiera reducir el período de referencia durante el cual se debe haber trabajado para recibir beneficios, reduciéndolo de 24 meses a 18.
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El endurecimiento de la condición de afiliación afectaría principalmente a los beneficiarios menores de 25 años o a aquellos que abandonen un contrato de duración determinada o temporal. “Esto confirma que las personas más alejadas del empleo y del empleo de calidad se verán afectadas. No podemos ver claramente el vínculo con el pleno empleo, estamos en la trampa de la pobreza”, comentó a la AFP Olivier Guivarch, negociador de la CFDT para el seguro de desempleo.
Otro posible escenario evaluado: una reducción a 12 meses de la duración de la indemnización, que actualmente es de 18 meses para los menores de 53 años. Esto supondría una menor cobertura para el 45% de los beneficiarios y una reducción del gasto de casi 6.000 millones para la Unedic. Reducir la duración de la indemnización afectaría a un perfil diferente de beneficiarios, especialmente a los mayores de 25 años, con prestaciones superiores a la media o que se encuentran en paro tras un despido convencional.
“Gracias a la Unedic tenemos cifras que el gobierno nunca da. Vemos que esto podría ser violento y reducir aún más el número de personas que pueden tener derecho a ello”, afirmó Denis Gravouil, negociador de la CGT sobre el seguro de desempleo. Las nuevas normas, que se espera sean más restrictivas, entrarán en vigor a partir del 1 de julio. Las decisiones del gobierno, previstas inicialmente para esta semana, se esperan muy pronto. Sin embargo, esto no debería ser la próxima semana, según una fuente gubernamental.