El esqueleto de un hombre que llevaba varios años muerto fue descubierto el 20 de febrero cerca de la prisión de Perpiñán, según informa la AFP, que cita fuentes que lo corroboran. Según el fiscal adjunto de Perpiñán, Nicolas Brignol, que abrió una investigación para determinar las causas de la muerte, se trata de «un esqueleto casi completo». «Los elementos recogidos ya permiten identificar a una persona», prosiguió, sin querer dar más detalles.
Sin embargo, “se tomaron numerosas muestras que se enviaron a laboratorios para identificar con certeza el cuerpo”, añadió el fiscal adjunto. «También se ha ordenado un examen antropológico para investigar, de ser posible, el origen de la muerte» que «seguramente se remonta a varios años», afirmó. Según una fuente cercana al caso, se trata de un hombre cuyo esqueleto fue descubierto al borde de un campo cerca de la prisión de Perpiñán.
