Los préstamos personales siguen cayendo con fuerza en el segundo trimestre, un 27,8% interanual, anunció el martes la Asociación francesa de sociedades financieras (ASF), penalizada por las reticencias de las entidades de crédito, cuyos productos son menos rentables. El importe de estos créditos al consumo no destinados a un bien concreto cayó de 3.810 millones de euros entre abril y junio de 2022 a 2.750 millones de euros en el mismo período de este año, una caída calificada de «grave» por la ASF, tras el -25,3% en el primer trimestre durante un año.
Estos productos son, desde el inicio del aumento de las tasas de interés de los bancos centrales para contrarrestar la inflación, mucho menos rentables para los bancos y otros actores de este mercado, que se han vuelto más selectivos. “A pesar de las medidas de pago mensual de la tasa de usura, el balance sigue siendo pesado para el préstamo personal”, observan los autores del estudio mensual finalizado a finales de junio.
Ya muy elevado para este tipo de préstamos, el índice de desgaste sólo varió ligeramente a lo largo del semestre, pasando del 21,04% el 1 de enero al 21,45% el 1 de julio para préstamos de importe inferior o igual a 3.000 euros. Este tipo máximo, calculado por la Banque de France para proteger al prestatario contra el sobreendeudamiento, se actualiza desde este año cada mes y no cada trimestre.
Con cerca de 96.500 millones de euros en circulación a finales de marzo, los préstamos personales representan casi la mitad de los créditos al consumo, según los últimos datos disponibles de la Banque de France. La financiación de vehículos nuevos también volvió a aumentar, un 10,5% en el segundo trimestre, indica la ASF, un «buen comportamiento (…) impulsado principalmente por las operaciones de alquiler con opción a compra (LOA)».
El volumen de financiación total de los coches nuevos, 2.580 millones de euros entre abril y junio, no dice nada, por el contrario, sobre la capacidad de reembolso de los prestatarios. De hecho, la ASF señaló el 20 de julio que, aunque las primeras facturas impagas se estabilizaran, «todavía persisten en la financiación del automóvil». En el conjunto de los préstamos al consumo, la producción lógicamente disminuye en el segundo trimestre (-4,7%), para un total de 12,19 mil millones de euros en nuevos préstamos. La ASF agrupa a unas 260 empresas de arrendamiento de muebles e inmuebles, factoring y otros servicios asociados.