Credit Suisse ha decidido adelantar la fecha de publicación de sus resultados trimestrales al día anterior al anuncio de los del banco UBS, que acudió a su rescate comprándolo bajo la presión de las autoridades suizas. Los resultados del primer trimestre se publicarán así el lunes 24 de abril, indicó este martes el grupo bancario en su sitio, y no el 27 de abril como estaba previsto inicialmente.
Estos resultados se analizarán de cerca, en particular para comprender el alcance de los retiros que enfrentó el banco durante el pánico que condujo a su rescate en marzo. En el último trimestre de 2022, el banco ya había sufrido retiradas masivas de dinero de sus clientes que habían ascendido a 110.500 millones de francos suizos (una suma equivalente en euros) en un mercado nervioso ante su gran proyecto de reestructuración. Pero un movimiento de pánico se apoderó de los mercados a raíz del banco estadounidense SVB. El 15 de marzo, las acciones de Credit Suisse, que llevaban dos años en caída libre, habían perdido hasta un 30% de su valor durante la sesión.
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En una emergencia, el Ministerio de Finanzas, el banco central y la autoridad de vigilancia del mercado habían sostenido conversaciones con su competidor UBS, el banco más grande del país, para convencerlo de comprar Credit Suisse y evitar su colapso. El 19 de marzo, UBS acordó adquirirlo por 3.000 millones de francos suizos, sujeto a sólidas garantías de la Confederación y el banco central. Sin intervención, el número dos del sector bancario suizo «con toda probabilidad» se habría declarado «insolvente el 20 o 21 de marzo», explicó la semana pasada el presidente de la Confederación, Alain Berset, ante los cargos electos durante una sesión extraordinaria del Parlamento.
UBS debe publicar sus resultados trimestrales el 25 de abril. Los presentará Sergio Ermotti, exjefe del banco de 2011 a 2020, llamado nuevamente a los mandos para llevar a cabo esta fusión que promete ser compleja. En 2022, UBS registró un beneficio neto de 7.600 millones de dólares (6.900 millones de euros al cambio actual), mientras que Credit Suisse sufrió una pérdida neta de 7.300 millones de francos.
