Ofrecer a sus empleados una buena calidad de vida profesional se ha convertido en la prioridad de muchos empresarios. Es tanto una cuestión de rendimiento económico como de recursos humanos para atraer a los mejores candidatos para la contratación. Las cien empresas que aparecen en la lista Best Workplaces 2023 destacan en esta atención a los empleados.

Cada año, desde 2002 en Francia, la empresa Great Place to Work audita varios cientos de empresas a pedido de ellas. Se desarrolla en dos etapas. Por un lado, administra el Índice de Confianza: este cuestionario de 60 preguntas se centra en la percepción de confianza y está dirigido a todos los empleados de la empresa auditada.

Por su parte, La Auditoría de Cultura es un expediente que realiza la empresa sobre sus prácticas de gestión. La certificación Great Place to Work es un reconocimiento de primer nivel que se otorga a empresas con una tasa de respuesta positiva al Trust Index de al menos el 65%. El ranking Best Workplaces se establece por la combinación de las dos valoraciones.

Para esta añada 2023, cerca de 500 grandes grupos y pymes se han comprometido en este ejercicio y 100 han ganado el sello Best Workplaces 2023. Para Le Figaro, Jullien Brezun, CEO de Great Place to Work, descifra las lecciones de este premio.

LE FIGARO.- ¿Qué enseña la lista Best Workplaces 2023?

Julien BREZÚN. – Lo más destacado de esta edición de 2023 es el alto nivel de selectividad con 100 empresas certificadas de las 489 auditadas, es decir, aproximadamente un 20%, frente a las 93 de 338 del año pasado. Encontramos en esta lista de grandes empresas tecnológicas – Mirakl, Voodoo, Contentsquare… Enfrentadas durante varios años a una guerra de talentos, fueron las primeras en experimentar la necesidad de un sello de calidad de vida en el trabajo. Pero cada vez vemos más empresas de todos los sectores. Por ejemplo, este año entran en la lista un hipermercado E. Leclerc, el despacho de abogados Jaberson o RTE, la red de transporte de electricidad. Esto muestra que la comprensión de la importancia de la experiencia del empleado se está extendiendo por toda la economía.

¿Qué tienen en común todas estas empresas? Más allá de los ganadores, estas empresas tienen tres principales características comunes. Por un lado, se trata de organizaciones que consideran al empleado como individuo y no como fuerza de trabajo. Por otro lado, tienen una cultura muy ética, con la gestión local practicando la comunicación de abajo hacia arriba y de arriba hacia abajo. Es también una cultura colaborativa que valora el espíritu de iniciativa al tiempo que asegura la asunción de riesgos.

¿No son contradictorias las expectativas de los empleados, en particular de los más jóvenes? Solo podemos notar hoy una tensión entre la individualización y la necesidad de un colectivo. La relación del empleado con el empleador se ha individualizado mucho en cuanto a: trabajar desde donde quiero, como quiero, con la herramienta que quiero. Esta hiperflexibilización es una ola muy fuerte sobre la que deben montarse los empresarios; ellos no tienen la opción. Al mismo tiempo, los empleados buscan un sentido: ¿cuál es la justificación de mi acción en la empresa? ¿Qué aporte positivo hace mi trabajo más allá de la empresa? Esta búsqueda se basa en lo colectivo y la inclusión. La resolución de esta paradoja entre la individualización de la relación y la necesidad de un colectivo requiere una gestión local y horizontal, atenta al desarrollo del talento de cada persona.

La búsqueda de sentido pasa por los grandes temas de la ecología… El ejercicio de su responsabilidad social y ambiental (RSE) es el gran desafío de todas las organizaciones y es, en particular, un tema de los departamentos de recursos humanos: deben movilizarse empleados para que se sumerjan en el enfoque de la RSC y se conviertan en sus impulsores y embajadores. Podemos trazar un paralelo con la transformación digital. Fue construido y dirigido por los CIO, luego los empleados se apropiaron de la digitalización. El mismo fenómeno de difusión y luego de infusión está funcionando para la RSE.