Las autoridades italianas ordenaron la incautación de más de 779 millones de euros de la plataforma de alquiler Airbnb como parte de una investigación de evasión fiscal, dijo el lunes la policía financiera. La fiscalía de Milán acusa a Airbnb de no haber recaudado un impuesto sobre los ingresos por alquileres percibidos por los propietarios durante el período de 2017 a 2021, según la misma fuente, y que debe ser remitido a las autoridades fiscales italianas.
La legislación italiana obliga a la plataforma estadounidense a recaudar un impuesto del 21% sobre los alquileres de corta duración. Cuando se contactó con Airbnb, no respondió de inmediato. A finales de octubre, el Gobierno italiano afirmó su intención de luchar contra los alquileres de corta duración que escapan a impuestos y de aumentar los impuestos a los propietarios que ofrecen más de un apartamento en plataformas como Airbnb. Una modificación del proyecto de presupuesto de 2024 prevé la creación de un “código de identificación nacional” asociado a los alojamientos turísticos que permitirá localizar aquellos que no han sido declarados a la Hacienda, explicó el vicepresidente del Consejo Antonio Tajani, tras una reunión cumbre de la coalición gubernamental.
«Así habrá transparencia y se regularizará todo el sistema», ha argumentado, añadiendo que esta medida presupuestaria «también aumentará los ingresos del Estado» y contribuirá a «reducir la carga fiscal» de las familias. En cuanto al aumento previsto del tipo impositivo, “sólo se aplicará a partir del segundo apartamento alquilado por cada propietario, por lo que no será para todos”, aseguró. Los propietarios de apartamentos de alquiler a corto plazo pueden optar actualmente por un tipo fijo del 21%. Este tipo aumentará hasta el 26% para el resto de pisos alquilados por un periodo inferior a 30 días.