Una “tragedia insoportable”. El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, deploró anoche la muerte de tres rehenes israelíes asesinados “por error” por soldados. El portavoz de las FDI, Daniel Hagari, reveló en televisión que el ejército había “identificado erróneamente a tres rehenes israelíes como una amenaza” mientras se encontraban en una “zona de combate” en Choujaiya, al norte de la Franja de Gaza. “Los soldados abrieron entonces fuego en su dirección y los mataron”, lamentó. Tras el tiroteo, surgieron “sospechas inmediatas” sobre la identidad de los muertos durante un escaneo y examen, detalló el portavoz. Luego, sus cuerpos fueron trasladados rápidamente a Israel, donde fueron identificados. Según Daniel Hagari, los rehenes “o habían escapado o habían sido abandonados” por sus captores. Prometió “una investigación transparente”.
Las víctimas son tres hombres. Los dos primeros, Yotam Haïm, un baterista de heavy metal de 28 años, y Samer al-Talalqa, un beduino de 25 años, fueron secuestrados en el kibutz Nir Am durante el ataque del 7 de octubre perpetrado por Hamás. El tercero, Alon Lulu Shamriz, vivía en el kibutz Kfar Aza. El ejército expresó su «profundo pesar» a las familias de las víctimas, precisando que habían perdido la vida en una zona donde las fuerzas israelíes libran «una batalla continua desde hace varios días» contra Hamás. Los cuerpos de las víctimas fueron repatriados a Israel.
Esta tragedia sumerge “en luto a todo el Estado de Israel”, lamentó Benjamín Netanyahu el viernes por la noche. Para la Casa Blanca, esta “desgarradora” noticia es un “trágico error”. «No creo que sea posible sacar conclusiones más generales de este acontecimiento particular y de lo que dice sobre la capacidad (del ejército israelí, nota del editor) de ser más quirúrgico y más preciso» en sus acciones, comentó su portavoz. En los últimos días, Washington ha seguido intentando convencer al Estado judío de que reduzca la intensidad de sus operaciones en Gaza. Joe Biden incluso criticó el martes, por primera vez, al gobierno “el más conservador de la historia de Israel”. «No quiere una solución de dos Estados» con los palestinos, afirmó el presidente estadounidense, al tiempo que alertó a su aliado de que corre el riesgo de perder el apoyo de la comunidad internacional debido a sus bombardeos «indiscriminados».
Un portavoz del ejército israelí, Olivier Rafowicz, afirmó sin embargo el viernes por la noche en BFMTV que esta tragedia «no cambia la dirección de la guerra contra Hamás y su eliminación». Estas tres muertes elevan a 22 el número de rehenes confirmados muertos. Tras la liberación de 110 personas, 129 siguen todavía cautivas de Hamás. Sin embargo, no es posible saber si todavía están vivos.