Barrido por los vientos alisios del noreste, Cuba disfruta de un clima tropical caracterizado por temperaturas suaves durante todo el año. La estación húmeda es entre mayo y octubre, mientras que la estación seca es de noviembre a abril. La temporada de huracanes es de junio a principios de noviembre, pero estos fenómenos tropicales ocurren más entre agosto y octubre.

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Fundada en 1514 por el conquistador español Diego Velázquez, La Habana es la ciudad más grande del Caribe. Apta para el turismo durante la estación seca, cuando el termómetro oscila entre los 26°C y los 29°C, la capital se divide en tres distritos: Centro Habana, centro histórico que alberga los principales monumentos, El Vedado por donde se puede caminar desde el Malecón y La Habana Vieja. Paseando por las estrechas calles empedradas de este último, estarás rodeado por cinco siglos de notable arquitectura española, lo que le valió al casco antiguo para ser catalogado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. También verá el Castillo del Morro, un castillo que se alza majestuoso sobre la bahía de La Habana. Al oeste de la capital, Pinar del Río alberga serranías y vastos campos de tabaco. Los amantes de la naturaleza deben dirigirse a Soroa, donde hay un bosque tropical que esconde cerca de 700 especies de orquídeas y una cascada de 12 metros que desemboca en piscinas que se cree que tienen propiedades medicinales. .

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Entre las imponentes montañas del Escambray al norte y el azul traslúcido del Mar Caribe al sur, Trinidad se destaca por la belleza de su entorno. La ciudad también seduce con el encanto colonial de sus casas color pastel, calles empedradas y pintorescas plazas. En Cienfuegos, llega a la península de Punta Gorda y admira las casas con tejas naranjas sobre un fondo de aguas turquesas. Ubicada entre dos ríos y una bahía que se abre al Estrecho de Florida, Matanzas se distingue por la belleza de sus arrecifes coralinos que harán las delicias de los amantes del buceo durante casi todo el año. La ciudad es también un excelente punto de partida para explorar las cuevas de Bellamar, que datan de hace más de 300.000 años. En Santa Clara, cuna del Che Guevara, puedes sumergirte en una de las tradiciones ancestrales de Cuba visitando la fábrica de tabaco local.

Con sus sublimes playas de arena blanca, Varadero es uno de los destinos costeros más populares del Caribe detrás de la República Dominicana. Es también uno de los símbolos del turismo de masas en Cuba… No muy lejos de allí, descubrirás la Reserva Ecológica Varahicacos, una reserva con senderos verdes por los que los amantes del senderismo pueden aventurarse de noviembre a abril. Apodada la Ciudad Blanca por sus playas vírgenes, Caibarién alberga una de las parrandas (carnavales) más famosas de Cuba cada diciembre. En Cayo Santa María, las sombrillas con techo de paja flotan sobre la suave arena que se extiende hasta las aguas azules, donde nadan una miríada de peces tropicales, admirados mientras bucean en aguas a 26°C durante la estación seca.

El pulso cultural de la isla, Santiago de Cuba ocupa un lugar privilegiado entre el azul del Mar Caribe y las montañas de la Sierra Maestra. Los carros tirados por caballos son comunes en las calles empedradas de la ciudad, donde el termómetro marca 28°C de noviembre a abril. Desde lo alto de la Loma de La Cruz se pueden contemplar los múltiples y encantadores parques y galerías de Holguín, donde la Playa Esmeralda invita a relajarse junto a sus aguas cristalinas. Las dunas se elevan sobre las hermosas playas que rodean Bahía de Miel y el aroma del chocolate local flota en las calles de tonos pastel de Baracoa, la ciudad más antigua de Cuba. No dejes de dar un paseo por las laberínticas calles del centro histórico de Camagüey, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, donde el agua de lluvia se almacena en las vasijas de barro que simbolizan la ciudad.

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