El actor Alan Arkin, tan dotado para la comedia como para la tragedia, ganador del Oscar por su papel de abuelo adicto a la heroína en Little Miss Sunshine (2006), ha muerto a los 89 años. El comediante estadounidense falleció el jueves 29 de junio en su casa de Carlsbad, California.
Los hijos de Alan Arkin, Adam, Matthew y Anthony inmediatamente le rindieron homenaje en los medios estadounidenses: “Nuestro padre era una fuerza de la naturaleza con un talento único, tanto como artista como hombre. Un amoroso esposo, padre, bisabuelo, fue adorado y será profundamente extrañado”.
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Alan Arkin fue nominado cuatro veces a los premios Oscar y ganó un premio Tony, el mayor honor de Broadway, en 1963 por su primer papel importante en el escenario en Enter Laughing de Carl Reiner. Su primer papel importante en una película también le valió una nominación al Oscar como Mejor Actor por interpretar a un marinero soviético en una comedia de 1966, “¡Llegan los rusos! ¡Vienen los rusos!
Por una curiosa paradoja, Alan Arkin fue inicialmente rechazado para el papel de Little Miss Sunshine, lo que finalmente le valió el Oscar al mejor actor en un papel secundario. Y esto porque los directores pensaron que estaba demasiado bien de salud, el personaje a encarnar siendo un abuelo de 80 años debilitado tras años de adicción a las drogas. El actor de sólido sentido del humor declaró años después: “Es la vejación más feliz de mi vida. pensaron que yo era demasiado varonil”. Alan Arkin también interpretó a un psicópata en la película de 1967 Espera hasta que oscurezca, junto a Audrey Hepburn. Más tarde diría que odiaba las escenas en las que su personaje aterrorizaba a la encantadora actriz: “No me gustaba ser cruel con ella. Me hizo sentir muy incómodo».
También recibió elogios de la crítica por su composición en el thriller Argo de 2012, que llevó a la pantalla la historia real de una misión de la CIA. Se recordará que esta producción de Ben Affleck ganó el Oscar a la mejor película. Y por supuesto en esta soberbia filmografía no podemos olvidar su increíble presencia junto a Michael Douglas en El método Kominsky, una de las series de televisión más sutiles de los últimos años.
