Thierry Breton es categórico. Europa «no pide en absoluto» a Francia que reforme las pensiones, «¡Europa no pide nada!», decide. El lunes por la mañana ante el micrófono de France Info, el comisario europeo de Mercado Interior ha querido puntear la «i» de una vez por todas. Él mismo se ha enterado con demasiada frecuencia de este argumento sesgado presentado por los opositores al proyecto de Emmanuel Macron, al que responde con un fuerte revés: «Si ese fuera el caso, no habría una disparidad en la edad de jubilación de las salidas en Europa». . En este punto, los Estados miembros son, por tanto, relativamente libres frente a la Unión Europea. “Depende de los estados decidir qué quieren hacer, y lo hacen”, resume.

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Sin embargo, aumentar la edad de jubilación parece ser “la tendencia” para la mayoría de los países europeos. “Dada la evolución demográfica, casi todos los Estados están superando progresivamente los 65 años”. Nada excepcional por tanto, según él, en la transición de los 62 a los 64 años. Sobre todo porque Francia tiene una de las edades de jubilación más bajas de los 27 países europeos. Sin embargo, en caso de que Emmanuel Macron retire su reforma para sorpresa de todos, Thierry Breton reconoce que Europa no tendría voz.

Para entender la necesidad de esta reforma es necesario, según el comisario europeo, acudir a los mercados financieros. La gran especificidad de nuestro país radica en su extraordinaria deuda. “Francia es hoy el país europeo que tiene la mayor deuda en valor absoluto”, observa Thierry Breton. Esto significa que nuestro país está entrando “de la manera más activa” en los mercados para financiarse. Claramente, Francia es el país europeo que más depende de la buena voluntad de los mercados financieros. Por ello, según él, no es la Unión Europea sino «los mercados financieros los que están atentos» a la reforma de las pensiones. Elevar la edad de jubilación sería, por tanto, la garantía para los financistas del fondo de comercio francés. Para Thierry Breton, Francia realmente no tiene opción: “cuando tenemos la mayor deuda en términos de volumen y somos el principal emisor de deuda en Europa, tenemos menos margen de maniobra que aquellos que no están en esta situación”. Según el comisario europeo, si Francia no se hubiera endeudado tanto, habría tenido más margen de maniobra en el expediente.