¿Se puede aprobar el proyecto de ley de inmigración? Si bien los debates en sesión pública aún no han comenzado, Le Figaro hace balance, grupo por grupo, del número de parlamentarios que, hasta la fecha, podrían votar el texto resultante de la comisión de derecho de la Cámara Baja.

En el Senado, Gérald Darmanin había velado por la derecha. En comisión, esta vez se centró en “tratar” con el ala izquierda de su mayoría. Mientras muchos macronistas temían el examen del proyecto de ley de inmigración en la Asamblea, todos los diputados del Renacimiento, incluidos los de izquierda, votaron favorablemente a la versión revisada del texto en comisión. “Por el momento, todo el mundo está alineado”, confiesa un diputado de izquierda.

También en el MoDem, la nueva versión del texto parece convenir a todos los diputados, incluidos los de izquierda, que habían indicado su “línea roja”, deseando absolutamente eliminar la abolición de la asistencia médica del proyecto de ley.

Los parlamentarios de Horizons han advertido: el proyecto de ley de inmigración todavía es “perfeccionable”. El presidente del grupo, Laurent Marcangeli, espera en particular que se restablezca el delito de estancia ilegal durante la sesión pública. Sin embargo, los 30 diputados del grupo votarían «todos a favor, sin excepción y sin escrúpulos», afirma Frédéric Valletoux, el texto tal como está hoy.

Si los diputados de RN siguen abiertos a una posible abstención en función de las “mejoras” que puedan introducirse en el texto en sesión pública, los 88 cargos electos votarían hoy en contra del proyecto de ley. «Estamos en contra, porque todavía existe la línea roja con las regularizaciones masivas de inmigrantes ilegales», informa el secretario general del grupo RN, Renaud Labaye.

A priori no habrá suspenso: todos los Insoumis se oponen al texto y, por tanto, los 75 diputados del grupo votarían en contra.

Ellos son los que inclinarán la balanza hacia un lado o hacia otro. Por el momento, una gran mayoría de los diputados de LR están en contra del proyecto de ley de inmigración tal como fue revisado en comisión. Si 17 diputados habían expresado en un foro su deseo de abordar el examen de este texto de manera “constructiva”, hoy son muy pocos los que se pronuncian favorablemente sobre la nueva versión de la reforma. Según nuestras informaciones, actualmente sólo dos diputados de LR votarían a favor: Mansour Kamardine (Mayotte) y Alexandre Vincendet (Ródano). “Hay medidas para endurecer las condiciones para la concesión de permisos de residencia y simplificaciones de los procedimientos. No votar a favor sería mortal para el derecho de gobierno. Es preferir la política política a los intereses del país”, juzga este último.

» LEER TAMBIÉN – Ley de inmigración: Gérald Darmanin alimenta las divisiones de LR

Según nuestras informaciones, actualmente sólo podrían abstenerse entre dos y cinco diputados. Entre ellos, cargos electos considerados «constructivo» como Nicolas Forissier o Virginie Duby-Muller, que no descartan votar a favor si el texto evoluciona «positivamente» en sesión pública. “Se han eliminado muchas cosas… Quizás soy constructivo, pero tampoco ingenuo. Las respuestas deben ser lo suficientemente contundentes”, afirma este último.

Además, algunos diputados que se habían mostrado bastante abiertos por el momento se han opuesto abiertamente al texto. “La mayoría envió un mensaje claro a LR: “¡Vete a la mierda!””, dice Stéphane Viry, por ejemplo. Así, una mayoría muy amplia de diputados (entre 55 y 58 diputados) votaría actualmente en contra del texto tal como está redactado.

Los socialistas se oponen totalmente al proyecto de ley tal como sale de la comisión. Sólo el diputado por Guadalupe Christian Baptiste, que considera loables los esfuerzos realizados por el ministro en los territorios de ultramar, confía a Le Figaro que no está dispuesto a la abstención.

Todos los ecologistas se oponen al proyecto de ley de inmigración y los 23 diputados del grupo están en contra de la versión actual del texto.

«Nos oponemos resueltamente a esta ley y votaremos en contra». El martes por la mañana, la comunista Elsa Faucillon se mostró firme. Sin embargo, poco antes, el secretario nacional de su partido, Fabien Roussel, no cerró la puerta a una posible abstención. Según nuestras informaciones, entre uno y cuatro de los 22 diputados del grupo, todos ellos extranjeros, considerarían abstenerse. Éste sería, por ejemplo, el caso del diputado por Guadalupe, Jiovanny William.

El gobierno espera obtener los 21 votos de los parlamentarios del grupo Liot (Libertés, Independientes, Ultramar y Territorios). Pero incluso si todos los diputados presentes en la comisión jurídica validaran el texto, el ejecutivo está lejos de ganar la partida. Según nuestras informaciones, entre 10 y 15 cargos electos del grupo votarían actualmente a favor de la versión elaborada por la comisión. Entre 4 y 10 podrían abstenerse, y entre 2 y 5 planean votar en contra.

Los diputados Emmanuelle Ménard, Véronique Besse y Nicolas Dupont-Aignan confirmaron a Le Figaro que no votarían a favor del proyecto de ley de inmigración tal como surgió de la comisión de derecho.

Por otro lado, David Habib, el ex parlamentario socialista, aún no tiene una posición firme. “Aún no he decidido nada, estoy esperando detalles”, asegura. No cierra la puerta al voto a favor, ni a la abstención, ni al voto en contra.

En total, con la versión actual del texto, hasta la fecha el gobierno sólo podría contar, según nuestras estimaciones, con 269 votos a favor (294 en contra y 14 abstenciones), en el mejor de los casos. Y en el peor de los casos, sólo obtendría 263 votos a favor (306 en contra y 8 abstenciones). Por el momento, el proyecto de ley de inmigración tendría muy pocas posibilidades de ser aprobado si todos los diputados estuvieran presentes en el momento de la votación.