En tan sólo unos años, la saga Octo Finissimo de Bulgari ha traspasado los límites de la delicadeza relojera, estableciendo una serie de récords mundiales en este ámbito. La creación de Fabrizio Buonamassa Stigliani, director creativo de la marca, se ha convertido ya en un referente de la relojería. Si a esto le sumamos la pasión de Laurent Picciotto, pionero de la relojería moderna, obtendremos dos exitosas ediciones limitadas en titanio arenado, literalmente tatuadas por el artista londinense Mo Coppoletta: un Aria salpicado de nubes y estrellas (2021) y luego un Aqua, con potentes efectos acuáticos. remolinos (2022).
A finales de año, la trilogía Octo Finissimo concluye con una versión en oro rosa cubierta de llamas tatuadas. “Soy fanático del Octo Finissimo desde sus inicios”, explica Mo Coppoletta, “porque tiene un diseño potente y refinado al mismo tiempo. Para interpretar una pintura tan prestigiosa, quería transmitir emociones tanto visuales como palpables, como elementos naturales cambiantes, en una narrativa de tres capítulos gráficos. Para esta tercera parte el lienzo básico lo forma el oro rosa. Quería expresar la calidez y la opulencia de este metal a través de un motivo ardiente y formas voluptuosas que contrastan con la linealidad de la caja y el brazalete. Así nació »Fuoco», en todo su poder visual. » Aquí, si la esfera, la caja y el brazalete se incendian con el rastro de las llamas, la “piel” queda “desnuda” en el bisel, en un sorprendente contraste. Hay que decir que el oro rosa se adapta perfectamente a la precisión del grabado láser para un tatuaje casi completo.
Con sólo 5,15 mm de espesor, que alberga en su interior un extraordinario calibre mecánico automático de 2,23 mm de espesor, provisto de una reserva de marcha de 60 horas, esta edición limitada de 15 ejemplares grabados con láser se ofrece únicamente en Chronopassion, en París. “En el oro rosa, las llamas del tiempo se entrelazan revelando la intensidad de una energía eterna que arde con gracia”, resume Laurent Picciotto.