El gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau, estimó el jueves que el deslizamiento del déficit en 2023 exige «por fin prestar una atención seria al gasto público», después de «quince años» sin que «los gobiernos mantengan (…) sus compromisos. Desde hace quince años, nuestro país y sus sucesivos gobiernos no cumplen sus compromisos plurianuales de sanear las «cuentas públicas», lamentó el gobernador durante un discurso en la Universidad Paris Dauphine.

El deterioro del déficit en 2023, que alcanzó el 5,5% del PIB en lugar del 4,9% inicialmente previsto por el Gobierno, «no significa, por supuesto, la quiebra de Francia», intentó tranquilizar, pero exige un imperativo. “Por fin debemos cuidar seriamente el gasto público”, insistió François Villeroy de Galhau. Y esto, «antes de tomar cualquier decisión potencialmente necesaria en materia de impuestos», dijo, en referencia a propuestas recientes destinadas a gravar los «superbeneficios» de las empresas o llevar a cabo aumentos de impuestos específicos.

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A pesar del desvío de 2023, el gobierno mantuvo su objetivo de reducir el déficit público por debajo del 3% del PIB en 2027, como prometió a sus socios europeos. Para conseguirlo, pretende dar una nueva vuelta de tuerca al presupuesto. Ya se han ahorrado 10.000 millones de euros para 2024 y se han anunciado 20.000 millones de recortes para 2025. Pero se necesitarán ahorros adicionales, según el ministro de Economía y Finanzas, Bruno Le Maire.

“Ya es hora de no decretar austeridad y una reducción general del gasto, sino de lograr esta estabilización general del volumen”, detalló François Villeroy de Galhau. “Esto requiere un esfuerzo de priorización y eficiencia, justo y compartido por todos: el Estado, pero también las autoridades locales y las prestaciones sociales”. Parlamentarios de la mayoría y de la oposición fueron invitados el jueves al Ministerio de Economía y Finanzas para proponer formas de ahorrar dinero. Se ha anunciado una segunda reunión en Bercy para el 9 de abril, esta vez para buscar, con asociaciones de funcionarios electos locales, posibles ahorros dentro de las autoridades locales.