Todos los planetas están alineados por Decathlon. La líder del mercado deportivo en Francia, que registró una facturación que aumentó un 12%, hasta 15.400 millones de euros en 2022, sería también la marca favorita de los franceses, según un ranking elaborado por el gabinete del OC.
Otras marcas han sabido conquistar a los franceses en este año de inflación. Entre los saltos en la clasificación, destaca el de Grand Frais, en tercera posición, que ganó tres puestos respecto al año pasado. La marca de gran distribución, más rentable que la media de la gran distribución, cuenta con más de 300 puntos de venta en toda Francia y se prepara para abrir su primera tienda en París. Grand Frais debe su reputación a sus grandes puestos de productos frescos, verduras de temporada pero también frutas exóticas, a menudo dispuestas bajo atomizadores que dan la impresión de una frescura absoluta. También en la distribución de alimentos, Picard, la marca insignia de alimentos congelados, sigue ocupando el segundo lugar del podio.
Entre las sorpresas en el podio, observamos el regreso a la fama de Yves Rocher, que sin embargo registró una caída de sus ventas en 2023, y de Leroy Merlin, que ganó cuatro puestos respecto al año pasado. Contra todo pronóstico, el gigante del mueble Ikea fue rechazado por los consumidores, a pesar de sus bajos precios y sus crecientes volúmenes de ventas. También se han desplomado las marcas de cultura y ocio Fnac y Cultura, debilitadas, según LSA, por sus precios excesivamente elevados en estos tiempos de inflación.