La FIFA ha actuado y ha asumido sus responsabilidades, pero aún no habíamos tenido noticias del presidente Infatino sobre el caso del beso forzado al final de la final del Mundial femenino. Está hecho. Recordemos que el presidente de la federación española Luis Rubiales besó a la fuerza a la internacional española Jenni Hermoso con motivo de la entrega del trofeo tras la victoria de España en la final del 20 de agosto. “Desafortunadamente, las merecidas celebraciones de estos magníficos campeones se vieron empañadas por lo que sucedió después del pitido final. Y lo que siguió pasando los días siguientes. Esto nunca debió de haber pasado. Pero sucedió y los órganos disciplinarios de la FIFA asumieron inmediatamente sus responsabilidades y tomaron las medidas necesarias. El procedimiento disciplinario seguirá su curso legítimo”, indicó Gianni Infatino este jueves por la noche en Instagram.
Y continúa: “Por nuestra parte, debemos seguir centrándonos en cómo apoyar más a las mujeres y al fútbol femenino en el futuro, tanto dentro como fuera del campo. Defender los verdaderos valores y respetar a los jugadores como personas y por sus fantásticas actuaciones”. Ante el escándalo planetario, Rubiales fue suspendido de sus funciones por la FIFA.
