Romance de Daigo Matsui, 1h55

Se amaban tanto. Obviamente, Teruo y Yo ya no están juntos. La película narra su unión al revés, un viejo proceso que aún funciona. Aquí hay siete de sus reuniones, cada una el 26 de julio, un día para marcar con una piedra blanca. Este es el día en que todo comenzó entre ellos. Además, es el cumpleaños del chico. La belleza y la dulzura son los dos senos de esta crónica que avanza hacia atrás, sin duda para mostrar que el pasado se está poniendo al día, como quien va río arriba. Y luego cómo ser exigente frente a una película que nos permite repasar brevemente a la grande, la inmensa Gena Rowlands. Con él, con mucho gusto dejaríamos que el contador funcionara indefinidamente.

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Película de animación de Takehiko Inoue, 2h04

Takehiko Inoue adapta y dirige el shônen (manga para jóvenes) que lo hizo famoso a principios de la década de 1990. La película se centra en Ryota Miyagi, el base del equipo de baloncesto de la escuela secundaria Shohoku. Algunos flashbacks intentan dar cuerpo y alma a este intrépido regateador: la muerte de su hermano mayor está en el origen de su vocación. La psicología de sus compañeros se reduce a arquetipos: el guapo taciturno, el genio rebelde, el cabrón… Pero lo principal se juega en el suelo, durante una final del campeonato nacional interescolar rica en idas y venidas, no siempre realista pero a veces divertido. El First Slam Dunk es un fenómeno en Japón, donde ha atraído a millones de espectadores. Debería cruzar fronteras sin esfuerzo, ya que los fanáticos del anime y el baloncesto abundan en todos los continentes. ES

Drame de Fernando Guzzoni, 1h34

No tiene veinte años, violaciones sufridas en su infancia, un bebé dependiente. El cura Manuel (el impecable Alejandro Goic) toma a Blanquita bajo su protección. Cuando ella le habla de una terrible red de pedofilia de la que habría sido víctima, él le aconseja que acuda a la justicia. El comienzo de su lucha contra un senador villano. En esta película inspirada muy libremente en el asunto Spiniak que sacudió a Chile en 2003, el director modula eficazmente la intensidad narrativa, alterna la elipse y el tiempo largo, utiliza efectos de sonido para dar acentos de thriller y sopesar el ambiente, ya de por sí lúgubre. La oficina del juez resuena, hacia el final, con un giro: ¿Estará mintiendo la valiente Blanquita? La trama, sólida hasta ahora, luego se marchita. Y nos encontramos un poco frustrados, como si nos enfrentáramos a un informe de juicio cuyo último párrafo estaba mal impreso. BP

Comedia de terror de Justin Simien, 2h05

Una semana después de Barbie, otro recuerdo de la infancia cobra vida en nuestros recuerdos interiores: la mansión embrujada, la atracción estrella de Disneyland. Viuda, Gabbie, médica de profesión, se muda con su hijo a Nueva Orleans. Por una miseria, compró una suntuosa mansión gótica en las afueras de la ciudad. Por desgracia, el edificio es el hogar de una gran cantidad de fantasmas que no comparten mucho. Gabbie (Rosario Dawson) recluta a un sacerdote (Owen Wilson), una clarividente (Tiffany Haddish) y un físico (LaKeith Stanfield) para cazar poltergeists. El director de Dear White People, Justin Simien, prepara una divertida comedia familiar de terror para adolescentes y padres. Sin una onza de segundo grado. Pero los sobresaltos son numerosos y la ternura siempre presente a través del retrato de protagonistas enlutados y atormentados por sus propias desapariciones. Favoreciendo los efectos especiales prácticos y manuales en lugar de las imágenes generadas por computadora, el cineasta se mantiene fiel a la atmósfera del tiovivo y otorga picantes papeles secundarios a Jared Leto y Jamie Lee Curtis.

Drame de Daniel Goldhaber, 1h44

Adaptado del manifiesto de Andreas Malm How to Blow Up a Pipe-Line, Sabotage parece una película de atracos de la década de 1970, filmada en 16 mm y bastante bien hecha. Constitución del equipo, preparación del golpe, ejecución -con algún imprevisto clave para mantener el suspense-. No se trata aquí de robar un banco sino de volar un oleoducto que transporta petróleo a través de Estados Unidos. Goldhaber filma a jóvenes activistas ambientales en acción con una sequedad casi documental. Sin embargo, dudamos de sus virtudes educativas -muy ingenioso capaz de hacer un detonador casero a la vista de la película. Algunos flashbacks informan al espectador sobre la trayectoria de cada uno de los miembros. No todos son izquierdistas cansados ​​de los neumáticos pinchados de los SUV. A modo de ambigüedad, es un poco corto, pero es mejor que nada. ES

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Comedia de Hugo P. Thomas, 1h35

Jordan, de 14 años, es un fanático adolescente de los videojuegos. Con su novio Patrick (Noah Zandouche), viven en un pequeño pueblo de provincia. Una tarde, los dos zozos están tan aburridos que uno toma la segadora y corta al otro. La operación se convierte en un desastre. Jordan (Ewan Bourdelles) le pide a su novio que le afeite la cabeza. Con su madre, el niño se justifica diciendo que es fanático de Akhenaton, el cantante del grupo IAM. Vanessa Paradis, como madre soltera abrumada por su trabajo como enfermera, se traga el bulo. Pero el lunes en la escuela secundaria, toda la clase mira a Jordan de manera extraña. El rumor se está extendiendo, el estudiante estaría sufriendo de cáncer. La emoción y la compasión transforman a este colegial polivalente en un héroe moderno. El argumento de la mentira “tan grande como una casa” recuerda obviamente a Antoine Doisnel que anuncia la muerte de su madre en Les Quatre Cents Coups de Truffaut, en 1959. Tras la referencia, la película pierde fuerza seriamente. SOBREDOSIS.

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