La Corte Suprema de Canadá validó este viernes un polémico acuerdo alcanzado con Estados Unidos en 2004, que establece que los solicitantes de asilo deben presentar su solicitud en el primer país al que lleguen. Los jueces consideraron por unanimidad que este “Acuerdo sobre terceros países seguros”, denunciado por asociaciones para la defensa de los refugiados, no “vulnera los derechos a la libertad y seguridad de la persona de los solicitantes de asilo”.
En julio de 2020, el Tribunal Federal de Canadá anuló el acuerdo y dictaminó que violaba la Carta Canadiense de Derechos y Libertades. Los grupos de defensa cuestionaron la constitucionalidad del acuerdo en nombre de los demandantes, incluida una mujer musulmana de Etiopía que estuvo recluida en régimen de aislamiento durante una semana en un centro de detención de EE. UU. después de ser devuelta por las autoridades canadienses.
Aunque «los solicitantes de asilo enfrentan riesgos reales y no especulativos de devolución desde Estados Unidos, el régimen legislativo canadiense proporciona válvulas de seguridad que protegen contra tales riesgos», dijo el juez Kasirer en el fallo. Sin embargo, la Corte considera que debe reconsiderarse el recurso relativo al “perjuicio a las mujeres que temen ser perseguidas por razón de su género”. Por lo tanto, el asunto se devuelve al Tribunal Federal.
«Estados Unidos no es un país seguro» para muchos refugiados, incluidas mujeres y personas LGBT, dijo la Asociación Canadiense de Libertades Civiles (CLAC). Corren el riesgo de «ser detenidos arbitrariamente y confinados en solitario en los Estados Unidos y luego ser devueltos a un país donde corren el riesgo de ser perseguidos, torturados o asesinados».
Amnistía Internacional Canadá expresó su decepción por esta decisión e instó al país a retirarse del acuerdo “lo antes posible”. «El acuerdo de ‘tercer país seguro’ pone a los refugiados, especialmente a aquellos que huyen de la persecución por motivos de género, en grave riesgo de devolución», dijo su secretaria general, Ketty Nivyabandi, durante una rueda de prensa.
Desde marzo, los migrantes pueden ser devueltos a través de toda la frontera entre los dos países. Antes de este cambio, el acuerdo no se aplicaba a los solicitantes de asilo que llegaban a Canadá fuera de los puertos de entrada oficiales, como Roxham Road, al sur de Montreal. En 2022, 40.000 migrantes llegaron desde Estados Unidos por este paso, que está cerrado desde marzo.