Cosa prometida cosa debida. En el Salón de la Agricultura se había anunciado la puesta en marcha de un «plan de sobriedad sobre el agua» para luchar contra la sequía. Este jueves, 30 de marzo, es a orillas del lago Serre-Ponçon (Hautes-Alpes) que Emmanuel Macron, acompañado del Ministro para la Transición Ecológica Christophe Béchu, eligió detallar las medidas de este plan destinado a mejorar la Gestión del Agua.

La elección no es aleatoria. Creado en 1959 por la construcción de la presa en el Durance, el lago Serre-Ponçon es la mayor reserva de agua dulce de Europa occidental. Auténtica torre de agua de Provenza, reúne todos los problemas del agua: limitación de inundaciones, distribución de agua potable, riego para la agricultura, producción de electricidad…

El lago de Serre-Ponçon es conocido por la importante variación del nivel de sus aguas, que ofrece cada año un espectáculo impresionante. En invierno, su nivel desciende unos quince metros debido a la renovada producción de energía eléctrica, dejando al descubierto kilómetros cuadrados de costas de arena y cantos rodados. En esta temporada, incluso túneles o puentes emergen de las profundidades, como los restos de una ciudad olvidada: estas son las infraestructuras sumergidas con los dos pueblos de Savines y Ubaye, en el momento de la creación del lago. El más conocido de ellos es el viaducto de Chanteloube, originalmente diseñado para soportar una vía férrea, cuyas elegantes curvas cruzan el valle ahora sumergido. Aislada sobre un guijarro de unos pocos metros cuadrados, desde donde ofrece su soledad a los ojos de los caminantes, la pequeña capilla de Saint-Michel vuelve a ser accesible a pie con poca agua.

Nada anormal, en principio, con la bajada del nivel… siempre que en primavera las lluvias y los deshielos hagan su trabajo y llenen el lago. Sin embargo, con la falta de precipitaciones y el aumento de las temperaturas que invariablemente han afectado a Francia durante los últimos cinco años, el nivel es inusualmente bajo. “Todas las napas freáticas muestran niveles por debajo de lo normal y el 80% de los niveles son moderadamente bajos a muy bajos”, indicó recientemente el Negociado de Investigaciones Geológicas y Mineras (BRGM). El verano pasado, el nivel del lago estuvo, por ejemplo, 15 metros por debajo del nivel esperado para la temporada. Un espectáculo que no dejará de conmover los ánimos, en el momento del discurso del Jefe de Estado.