En sus últimas previsiones, la Comisión de la Construcción de Quebec calcula la necesidad de trabajadores en esta industria en 17.000 al año. Se trata de un aumento de 1.000 trabajadores desde el año pasado.

Su estimación se basa en los proyectos de construcción anunciados hasta diciembre de 2023, teniendo en cuenta también el envejecimiento de la fuerza laboral, el número de graduados, la tasa de rotación de la fuerza laboral, etc.

“En general, las perspectivas profesionales en la industria de la construcción son excelentes; La actividad en las obras de construcción seguirá siendo importante, la disponibilidad actual de trabajadores es baja y un envejecimiento más marcado también afecta a algunas profesiones”, resume el CCQ en sus Perspectivas del sector 2024-2028.

Por tanto, la demanda no se está desacelerando. Y afecta particularmente a tres regiones: el Gran Montreal, Quebec y Mauricie, afirmó en una entrevista Audrey Murray, presidenta y directora ejecutiva de la Commission de la Construction du Québec.

Cinco oficios son particularmente demandados, señala la Sra. Murray: carpintero, electricista, obrero, instalador de tuberías y operador de excavadoras.

Por tanto, propone cuatro estrategias para responder a esta demanda sostenida: primero retener a los trabajadores que ya están en el sector, luego aumentar el número de titulares de un Diploma de Estudios Profesionales (DEP), apoyar los cursos de formación abreviados ya anunciados y aprovechar las medidas. previstos en la nueva ley en relación, en particular, con el reparto de tareas y la movilidad laboral.

También debemos seguir contratando en categorías de trabajadores que todavía están subrepresentados en esta industria, como mujeres, comunidades culturales y miembros de las Primeras Naciones.

Entre otras cosas, apuesta por una mayor movilidad interregional de los trabajadores, prevista en su nueva ley, que debería permitir responder mejor a las necesidades de las regiones remotas.

Y también apuesta por el reparto de tareas entre determinadas profesiones, también previsto en su nueva ley, para aumentar la productividad del sector.

Esta ley también prevé un mayor reconocimiento de la experiencia adquirida en un sector distinto al de la construcción, pero afín.

No sólo la demanda es fuerte, sino que «estamos convencidos de que se intensificará en los próximos años», con proyectos que afectarán a escuelas, hospitales, carreteras, sin olvidar el sector de las baterías y el sector energético, recordó el Ministro Boulet.