Cuando pensamos en la “coqueta del barrio”, este es exactamente el tipo de cabaña que nos viene a la mente. Situado en Lévis, a orillas del río San Lorenzo, con su cálido color amarillo y sus impresionantes vistas, puede presumir de haber disfrutado de un cuidadoso mantenimiento.

Aunque data de 1865, la pequeña propiedad muestra una radiante cara blanca en sus paredes interiores. Columna de ladrillo, escalera de madera en resonancia con el mobiliario, suelos desgastados, encimeras de cocina y baño en tonos rojos, pero sin agresividad… sí, se respiraba mimo en el aire.

Los dos dormitorios de arriba han sido decorados con esmero, pero también es el exterior el que resulta un poco de ensueño, con una gran terraza íntima al lado del río. Huele a aperitivo al aire libre, sobre todo porque las fotografías aéreas muestran el potencial de una mejor vegetación en la tierra. Este sábado 15 de junio se llevará a cabo una jornada de puertas abiertas desde el mediodía hasta las 2 p.m.