Querida Leticia,
No tengas miedo. En esta etapa del embarazo, es seguro volar, especialmente en un vuelo corto como este. La mayoría de las aerolíneas aceptan viajeras embarazadas con hasta 36 semanas de amenorrea (es decir, 38 semanas de embarazo, que corresponde al inicio del noveno mes), independientemente de la duración del vuelo.
Air France, por ejemplo, desaconseja viajar únicamente a partir de la semana 37 y los siete días siguientes al parto. Mismas condiciones en British Airways, Lufthansa y RyanAir. EasyJet es un poco más severo ya que prohíbe el embarque a partir de la semana 35. Pero tenga cuidado si está esperando gemelos o trillizos: en caso de embarazo múltiple, el plazo suele aumentar hasta las 32 semanas. Más allá de este plazo, el principal riesgo es, por supuesto, dar a luz en pleno vuelo.
La mayoría de las empresas aconsejan (y algunas exigen) a las mujeres al final del embarazo que traigan un certificado proporcionado por un médico que indique la fecha del parto y acredite la ausencia de complicaciones médicas. En ocasiones, estos certificados se pueden descargar directamente desde la página web de la aerolínea: recuerda comprobar, en cualquier caso, las condiciones que se aplican al tuyo antes de viajar.
Este no es el caso aquí, pero si por casualidad tomaras un vuelo de larga distancia, sería necesario tomar algunas precauciones adicionales. En sus recomendaciones, la Alta Autoridad Sanitaria toma pinzas: «Las mujeres embarazadas deben ser informadas del riesgo aparentemente mayor de sufrir trombosis venosa durante los vuelos de larga distancia, aunque no está demostrado que este riesgo sea mayor durante el embarazo. ¡Eso no nos lleva muy lejos! El mejor aliado para soportar largas horas de vuelo, embarazadas o no, siguen siendo las medias de compresión. “En la población general, basta con utilizar medias de compresión adecuadas para reducir el riesgo”, especifica la HAS.
Por último, algunas ideas para hacer tu viaje más cómodo: llevar ropa holgada, tomar un asiento en el pasillo para poder moverte con facilidad, mantenerte bien hidratado y abrocharte el cinturón de seguridad debajo de la zona pélvica. Aunque no es nada automático, algunas compañías aéreas reservan asientos con más espacio para mujeres embarazadas (easyJet lo menciona, por ejemplo): vale la pena preguntar.
Buen viaje !