Los vecinos los ven pasar pero no pueden subir al barco. Y con razón los únicos trenes que circulan por allí (unos veinte al día) son trenes de mercancías. Desde hace 50 años, Ardèche es el único departamento de Francia continental que no tiene ninguna estación de tren activa. El fallo reside en el cese del tráfico de viajeros en la línea llamada “margen derecha del Ródano” que unía Givors (Ródano) con Nimes a lo largo de 254 kilómetros hasta agosto de 1973.

“La SNCF ha decidido suspender a partir de hoy su tráfico de pasajeros en 666 kilómetros de líneas locales. Esta decisión, conforme al contrato programa firmado con el Estado en 1969 y que preveía el cierre de 10.000 kilómetros de líneas secundarias, convertirá a Ardèche en el primer departamento francés que ya no contará con trenes de pasajeros”, escribió Le Figaro en su edición del 6 de agosto de 1973. Hoy en día, la línea “acoge ocasionalmente trenes de pasajeros en caso de perturbaciones importantes en las líneas de la margen izquierda del Ródano”, recuerda SNCF Réseau. Pero en este caso no se realiza ningún apagado.

Esta excepción de Ardèche pronto será parte del pasado. Bajo el liderazgo de la región de Occitania, la margen derecha de la línea del Ródano se reabrió parcialmente en agosto de 2022 entre Nimes y Pont-Saint-Esprit, dando servicio al centro de Aviñón y a Bagnols-sur-Cèze en particular. Si se detiene a las puertas de Ardèche, el departamento se beneficiará de su ampliación a Teil a partir de finales de 2026. Se realizarán entonces ocho viajes de ida y vuelta en toda la línea que se recorrerán en su totalidad en 1 hora y 20 minutos.

La región de Auvernia-Ródano-Alpes está realizando estudios sobre la conveniencia de ampliar la línea hasta Romans-sur-Isère (Drôme), cerca de Valence, a partir de 2028. Hasta entonces, los únicos trayectos posibles para las conexiones ferroviarias en Ardèche se realizan a bordo del vapor histórico. trenes, como el Train de l’Ardèche que circula entre Tournon-sur-Rhône y Lamastre.

EN VIDEO – Después de 50 años de cierre, la línea de la margen derecha del Ródano se reabre al tráfico de pasajeros