«Mal gusto», «horrible», «nada divertido»: tras la gélida recepción reservada por la crítica a la comedia de Roman Polanski, el Festival de Venecia destaca el lunes a Woody Allen, otro cineasta desterrado de Hollywood.
A diferencia de Polanski, que ha estado prófugo de la justicia estadounidense durante 40 años tras una condena por relaciones sexuales ilegales con una menor, Woody Allen no está preocupado por los tribunales y no ha resultado ninguna investigación por agresión sexual en su contra. A sus 87 años, el director de Annie Hall y Match Point, maestro del humor y de la sátira social, vive desde hace varios años al margen del séptimo arte, apenas realiza giras por Estados Unidos y se ha convertido para algunos en uno de los símbolos de violencia machista y sexual. En cuestión: las acusaciones de agresión sexual lanzadas por Dylan Farrow, a quien adoptó cuando era niño, con su ex esposa Mia Farrow.
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Su invitación a la Mostra, en la que a priori debería pisar la alfombra roja para presentar fuera de competición Coup de chance, tiene todo para dividir. Por un lado, quienes lo ven como un símbolo de la impunidad de los artistas, por otro, quienes piden favorecer la presunción de inocencia o separar al artista de su obra, como el director del festival, Alberto Bárbara. . En lo que respecta al cine, ¿será Coup de chance la última resistencia de un cineasta necesitado de inspiración en los últimos años, o un estallido creativo? Esta quincuagésima película es su primera rodada en Francia con los actores franceses Lou de Laâge, Melvil Poupaud, Niels Schneider y Valérie Lemercier. Promete ser un thriller teñido de vodevil, en torno a una relación extramatrimonial en el París de los barrios bellos y se estrenará en las salas francesas el 27 de septiembre.
En cuanto a la carrera por el León de Oro, esta 80ª edición de la Mostra, que continúa en ausencia de la mayoría de las grandes estrellas debido a la histórica huelga de actores y guionistas de Hollywood, sigue muy abierta. Entre las favoritas de la crítica internacional, a mitad de camino, destaca una película fantástica con la estrella estadounidense Emma Stone, Pauvres Créatures, del griego Yorgos Lanthimos (La langosta, La favorita). También destacaron el Ferrari de Michael Mann, con Adam Driver, o La Bestia de Bertrand Bonello, con Léa Seydoux.
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El presidente del jurado, Damien Chazelle (La la Land, Babylon) y sus colegas, entre ellos la directora Jane Campion, verán el lunes dos películas muy esperadas: Priscilla, de Sofia Coppola, una película biográfica sobre la esposa del «rey» Elvis Presley, y la nueva película del japonés Ryusuke Hamaguchi, El mal no existe, tras el éxito de Drive My Car, premiada en Cannes antes de acudir a los Oscar. Del lado francés, todavía se esperan en competición Stéphane Brizé (Fuera de temporada, con Guillaume Canet) y fuera de competición Quentin Dupieux, coronado por el éxito estival de su comedia Yannick, por su última película absurda, Daaaaaali!.