Los diputados esperan con impaciencia el texto. Este miércoles llegará a la Asamblea Nacional el proyecto de ley destinado a asegurar Internet. Aprobado previamente por el Senado, también transcribe al derecho francés las nuevas normas europeas sobre tecnología digital. Aquí tenéis sus principales medidas.

“¿Quién no ha recibido nunca un mensaje de texto intentando extorsionarle para acceder a su cuenta personal de entrenamiento o a su seguro médico?” El ministro de Asuntos Digitales, Jean-Noël Barrot, quiere cumplir la promesa de Emmanuel Macron de crear un filtro antiestafa gratuito que enviará un mensaje de advertencia a todo aquel que esté a punto de acceder a un sitio identificado como malicioso.

En segundo lugar, este sistema puede dar lugar al bloqueo administrativo del sitio web implementado. La medida implicará establecer una lista de estos sitios fraudulentos y acuerdos con «operadores de acceso a Internet y editores de navegadores web».

El reglamento europeo sobre servicios digitales (DSA), transcrito en el proyecto de ley, ya incluye medidas destinadas a frenar el ciberacoso en las grandes plataformas digitales, obligándolas a eliminar las cuentas que les son denunciadas. Pero el gobierno quiere ir más allá y acompañar esta medida con una pena de destierro. En concreto, el juez podrá pedir a una red social que impida durante un período de seis meses -un año en caso de reincidencia- la reinscripción de una persona ya condenada por ciberacoso.

Los debates en comisión de la Asamblea fueron también una oportunidad para añadir una disposición tendiente a generalizar la atribución de una “identidad digital” a todos, con el objetivo asumido por parte de la mayoría de facilitar el levantamiento del anonimato en Internet. Los eurodiputados también aprobaron en comisión la creación de una multa fija para los delitos que impugnen crímenes contra la humanidad, difamación e insultos racistas o cometidos por razón de sexo u orientación sexual, en el espacio digital.

El Gobierno confiará a la Autoridad Reguladora de la Comunicación Audiovisual y Digital (Arcom) la facultad de ordenar, sin asistencia judicial, el bloqueo por parte de los operadores de telecomunicaciones y la exclusión de sitios pornográficos que no impidan a menores acceder a sus contenidos. El gobierno retoma así una medida propuesta por cuatro senadores en un informe reciente sobre los abusos de esta industria.

Los agentes de Arcom también podrán prestar juramento para denunciar infracciones.

El texto también otorga a Arcom el poder de detener la transmisión en Internet de medios prohibidos en la Unión Europea. La medida se dirige especialmente a los sitios de streaming no europeos como Odysee o Rumble, que habían retransmitido los canales prorrusos Russia Today y Sputnik a pesar de su prohibición en la UE como parte de las sanciones adoptadas tras la invasión de Ucrania.

A petición del ministro, Odysee dejó de emitir los canales y Rumble cerró su servicio a los internautas franceses.

Una medida más económica e inspirada en el trabajo de los parlamentarios, el gobierno quiere permitir a las empresas «cambiar mucho más fácilmente» de proveedores de infraestructuras y servicios TI, también llamados operadores de nube. El sector está dominado por los actores estadounidenses AWS (filial de Amazon), Microsoft Azure y Google Cloud.

El texto prevé, en particular, permitir la «portabilidad» de los datos entre los servicios de estas diferentes empresas y limitar el uso de «créditos en la nube», vales de compra gratuitos que hoy utilizan los jugadores para fidelizar a sus clientes.

Durante el examen del texto, el Senado añadió un componente legislativo relativo a la regulación de los juegos con objetos digitales monetizables (Jonum), eliminando la autorización para legislar mediante ordenanza prevista por el gobierno. El texto ofrece una primera definición jurídica de sus especificidades, entre los juegos de dinero y de azar, por un lado, y los videojuegos, por otro.

El Senado autorizó la creación de Jonum con carácter experimental por un período de tres años, al tiempo que lo supervisa para garantizar la protección de los menores y prevenir los riesgos de una creación indebida de casinos en línea.