Es una de las herramientas utilizadas por el Presidente de la República en su “planificación ecológica”. Mientras el ejecutivo espera reducir las emisiones de carbono del país en un 55% de aquí a 2030, Emmanuel Macron recordó la necesidad de renovar casas y apartamentos. El Gobierno podría haber decidido aumentar el presupuesto de MaPrimeRenov’, la principal ayuda pública para la realización de obras energéticas, de 3,4 mil millones a 5 mil millones de euros; un informe parlamentario considera que este aumento no es suficiente.
“Ya es un esfuerzo real (…) Pero no debemos quedarnos ahí. Calculamos que el presupuesto global debe multiplicarse por tres, para llegar a 15 mil millones por año en 2030”, indica a Le Parisien la diputada del Renacimiento por Isère Marjolaine Meynier-Millefert, también co-relatora del informe. El documento parlamentario también menciona el resto a pagar por los hogares. Y hace varias propuestas.
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Entre ellos, la creación de un «banco de renovación», en el que podrán participar «entidades de crédito, empresas financieras, empresas financieras de terceros y autoridades públicas». «El objetivo es apoyar mejor a los hogares una vez deducidas las ayudas públicas», afirma la diputada (EELV) por Loira Atlántico Julie Laernoes, la otra coponente. Y añadió: “Este coste restante puede ascender rápidamente a varios miles de euros, lo que constituye un verdadero obstáculo para emprender la renovación de las viviendas, aunque también es una palanca para ahorrar en la factura energética, una vez finalizadas estas obras”.
