Unos 1.200 millones de dólares invertidos, 15.000 nuevas personas movilizadas sobre el tema… Amazon está tomando medidas para proteger a sus clientes y marcas de la falsificación y la creación fraudulenta de cuentas.
El año pasado, su Unidad Anti-Falsificación (CCU) asegura haber detectado 800.000 intentos de creación de cuentas maliciosas, frente a los 2,5 millones de 2021 y los seis millones de 2020. Cifras a la baja, que la compañía atribuye a la mejora de su sistema de protección automatizado, gracias a una estrecha colaboración con las marcas presentes en su plataforma.
Para llevar a cabo su misión, la unidad, creada en 2020, ha contratado a científicos de aprendizaje automático, desarrolladores de software e investigadores expertos. Gracias a ella, Amazon pudo identificar, incautar y eliminar más de 6 millones de productos falsificados, el doble que en 2021.
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El gigante también indica que ha presentado denuncias o remitido a las autoridades a más de 1.300 infractores en Estados Unidos, Reino Unido, la Unión Europea y China. Esta lucha contra la falsificación se ha convertido en un tema aún más crucial para Amazon ya que a partir del próximo verano entrará en vigor en el Viejo Continente la nueva legislación de la Unión Europea sobre servicios digitales (DSA).
Esta ley restringe aún más a las principales plataformas como Amazon para combatir la venta de productos falsificados en línea y moderar los riesgos asociados con el uso de sus servicios.
