La Primera Ministra inicia su regreso político y mediático con un sutil pero firme llamado al orden. Invitada el miércoles por France Bleu al final del Consejo de Ministros, Elisabeth Borne reprendió a su ministro del Interior. «Estamos en 2023, nos estamos preparando para 2024 y 2027, todavía falta mucho», afirmó cuando Gérald Darmanin debía reunirse con sus familiares el domingo en Tourcoing. Una iniciativa política sin precedentes para el número tres del gobierno tras su decepción por no haber sido nombrado miembro de Matignon el pasado mes de julio.

Sus recientes confidencias en Le Figaro, donde critica a la «izquierda bobo-liberal», no pasaron desapercibidas en Matignon. «Lo que me preocupa ahora es lo que sucederá en 2027″, admitió también, abriendo el debate sobre el post-Macron. «Moi, ma préoccupation, c’est vraiment la cohésion du gouvernement, l’efficacité de l’action du gouvernement, l’unité de la majorité», a insisté Elisabeth Borne, qui a débuté sa semaine en recevant les patrons des partis de la mayoría. A mediados de septiembre asistirá a las jornadas parlamentarias de MoDem, Horizons y Renaissance.

“El Ministro del Interior, como todo el gobierno, tiene una prioridad, que es responder a las expectativas de los franceses, prepararse también para los grandes plazos que tenemos por delante, apoyar a nuestro país en la transición ecológica, continuar la reindustrialización y el pleno empleo”, criticó la Primera Ministra, que no irá a Tourcoing, sobre todo porque no fue invitada por su ministro. Allí se tratará de las clases trabajadoras en un momento en el que el presupuesto de 2024 estará marcado por una vuelta de tuerca para luchar contra los déficits.

«Escucho plenamente las fuertes expectativas de las clases medias», declaró Elisabeth Borne, quien juró que «no se trata de aumentar los impuestos a los hogares, sino al contrario». El Primer Ministro, sin embargo, confirmó que el aumento de las franquicias médicas es efectivamente «una vía» explorada por el Gobierno, que deberá decidir la cuestión «pronto». «Somos un país en el que consumimos más drogas que nuestros vecinos y eso forma parte de las reflexiones», dijo, prometiendo «proteger a personas muy modestas y a pacientes que padecen infecciones crónicas o de larga duración».

Por el contrario, Elisabeth Borne certificó que “no existe ningún plan para aumentar los impuestos sobre el alcohol”.