El inicio de la campaña europea de Marie Toussaint va de un extremo al otro. En su primera reunión, a principios de diciembre en París, el cabeza de lista de los ecologistas impresionó con su “terapia del botín”. Esta elección provocó burlas, pero también críticas en su propio bando, donde algunos consideraron que esta puesta en escena era inapropiada. Un gran mes después, cambio total de escenario. Para sus felicitaciones a la prensa previstas para el viernes, Marie Toussaint eligió el memorial de Mont Valérien, en Suresnes (Altos del Sena), donde estará acompañada por Marine Tondelier, secretaria nacional del partido.
Altamente simbólico, el lugar está lleno de historia. En esta pequeña montaña que domina la capital, 1.009 combatientes de la resistencia y rehenes fueron fusilados durante la Segunda Guerra Mundial. Por lo general, sólo los presidentes de la República acuden allí para las ceremonias conmemorativas. “Si bien hoy hay guerras en todo el mundo, queríamos un lugar simbólico que ilustrara la paz. Será también una oportunidad para recordar las raíces de Europa”, explica el entorno de Marie Toussaint.
“Es una elección que hará que la gente hable y eso es bueno. ¿Quién más habría hablado de los deseos de Marie Toussaint?”, comenta otro directivo ecologista que considera “bastante inteligente” organizar una puesta en escena diametralmente opuesta a la de la primera reunión. “Quiere demostrar que puede representar a todos”, desciframos. La cabeza de lista de los Verdes también sabe que su notoriedad está muy por detrás de sus competidores. La apuesta: que este tipo de iniciativas le permitan destacar.