Le deuil de son père, le temps qui passe, la confiance en soi… Dans une interview donnée à France Inter lundi, la romancière Virginie Grimaldi se livre à cœur ouvert à quelques heures de la parution de son nouveau roman, Plus grand que el cielo. Con más de siete millones de ejemplares vendidos desde su primer libro en 2015, es la autora más leída en Francia. En 2022, su bestseller Ya es hora de volver a encender las estrellas fue votado como el libro favorito de los franceses.

Para su décima novela, Virginie Grimaldi se basa en su historia personal y forja vínculos íntimos con sus personajes. Bigger than the Sky sigue la muerte de su padre, ocurrida hace nueve meses, después de su batalla contra la enfermedad de Alzheimer. Virginie Grimaldi precisa que al principio “no se suponía que fuera una novela”, sino más bien una “conversación con él”. “Amplié nuestra relación escribiéndole todos los días”, explica a France Inter. Luego se le ocurrieron los personajes y la novela tomó forma.

Greater than the Sky relata el encuentro entre Elsa, una asesora funeraria que acaba de perder a su padre, y Vincent, un consumado novelista. Virginie Grimaldi confiesa haber puesto un poco de sí misma en cada uno de los dos protagonistas: “Es el libro en el que hay más de mí”. Ella confía en el dolor de haber perdido a su padre, a quien describe como “todavía tan intenso” a pesar de los últimos meses. «Cuando ella me agarra, me abre el pecho y siento que nunca más voy a levantarme». Recuerda su adolescencia, que pasó “tratando de devolverle la alegría”, tras el divorcio de su madre, y cuenta cómo la enfermedad de Alzheimer lo privó de su libertad. “No sé cómo vivimos la ausencia, todavía no puedo hacerlo”, confiesa. También revela que ha estado “en esta búsqueda de la felicidad absoluta durante mucho tiempo” y que ahora se permite “no estar bien”.

Lea también Edición: Virginie Grimaldi o el éxito deslumbrante de una mujer desconocida

En sus reflexiones sobre la muerte, Virginie Grimaldi confiesa que el paso del tiempo es “algo que [la] aterroriza”. «Se nos debería enseñar que vamos a morir como nos enseñan el teorema de Pitágoras», sugiere. La novelista, que se declara partidaria del proyecto de ley sobre el fin de la vida, lamenta que el texto no vaya “más allá”. “Llegamos muy tarde y lo que me molesta un poco es que algún día llegue la ley y que habrá todas estas personas que han sufrido sin tener derecho a ello”, cree, lamentando que los pacientes de Alzheimer sean excluidos de estas disposiciones que se están debatiendo en el Parlamento.

Virginie Grimaldi también aborda en su novela una reflexión sobre el mundo editorial, que descubrió contaminado por “cosas políticas” y “cosas de poder que lo gobiernan”. ¿No dejó su héroe Vincent su editorial comprada por un hombre poderoso? Ella misma cerró de golpe la puerta de las ediciones Fayard tras “la llegada de Vincent Bolloré e Isabelle Saporta y todo lo que la rodeaba: vi caer la cabeza de los periodistas”. “Estaba en condiciones de no aceptar y demostrar que no estaba de acuerdo con ser sincera”, explica a France Inter.

Leer tambiénDespués de Virginie Grimaldi, otros autores abandonan las ediciones Fayard

En cuanto a los críticos profesionales, que no son muy amables con sus novelas, Virginie Grimaldi se ha puesto de su lado. Sin embargo, dice que le duele “el desprecio hacia los lectores”, que ellos pueden traducir. Un desprecio que, a sus ojos, equivale a “desprecio de clase”, más que a una crítica literaria. “El éxito no da confianza en uno mismo”, añade, precisando que siempre tiene “miedo de decepcionar” a sus lectores, cada vez más numerosos. Aunque la autora, que “siempre se sintió diferente”, ahora se siente “en su lugar”. Escribir “me dio una razón de ser”, concluye.