François-Noël Buffet es senador LR del Ródano.

Marc-Philippe Daubresse es senador de LR por el Norte.

El 16 de octubre y el 2 de diciembre de 2023, nuestro país fue golpeado por ataques terroristas, una trágica ilustración de la prevalencia de la radicalización islamista violenta en nuestro territorio, pero también de nuestra vulnerabilidad a sus acontecimientos.

Esta amenaza ya no es la única causa de los grupos radicalizados, apoyados material y logísticamente por organizaciones terroristas internacionales, incluso desde zonas de combate. Se caracteriza sobre todo por el acto de individuos aislados, que ponen los pocos recursos a su disposición al servicio de un proyecto mortífero, fruto de una radicalización solitaria y rápida, llevada a cabo principalmente en línea y en las redes sociales.

Cualquiera que sea la magnitud y la motivación, un ataque terrorista, especialmente cuando se comete en nuestra capital o contra un maestro, símbolo vivo de la República, nos toca el corazón y exige la respuesta más enérgica posible. No debemos temblar en responder con la mayor intransigencia y eficacia a los actos terroristas, que ponen en peligro la seguridad de todos y socavan las bases de nuestro pacto republicano. Se lo debemos a las víctimas. Se lo debemos a los franceses.

Está claro que nuestro arsenal jurídico ya no se adapta a las formas más recientes de amenaza terrorista en nuestro territorio. Construido para reprimir las amenazas provenientes de grupos organizados, hoy lucha por detener dos fenómenos que caracterizan hoy las acciones terroristas que nos amenazan: por un lado, la radicalización en territorio nacional de menores educados en Francia y, por otro lado, , la atención a los adultos radicalizados, liberados o no de prisión, que padezcan o no trastornos psicológicos, casi la mitad de los cuales no han renunciado a llevar a cabo acciones terroristas.

Hoy hay una emergencia: nuestro país se prepara para acoger, desde hace casi dos meses y en varias sedes francesas y extranjeras, los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, un acontecimiento mundial particularmente expuesto a una gran amenaza terrorista. ¡No tenemos margen de error! Garantizar la actualización de los medios jurídicos que exigen esta evolución y este plazo: este es el objetivo del proyecto de ley que presentamos al Senado y que examinó por iniciativa del grupo Les Républicains el 23 de enero de 2024.

Este texto no pretende alterar los equilibrios construidos en la lucha contra el terrorismo durante los últimos treinta años. Busca un equilibrio justo entre la necesidad de dotar a las autoridades públicas de medios de acción sólidos y el respeto estricto de las libertades públicas. Alimentado por las observaciones y propuestas de los actores judiciales y administrativos en la lucha contra el terrorismo, persigue el objetivo principal de consolidar nuestra estructura jurídica y remediar las deficiencias judiciales y administrativas que han aparecido a la luz de los recientes ataques.

A tal efecto, el texto del Senado establece medidas de seguridad judicial contra los terroristas condenados que salen de la detención, incluidos los que padecen trastornos psiquiátricos, imponiéndoles obligaciones de cuidado y autorizando, excepcionalmente, medidas de seguridad de detención contra ellos. Refuerza el seguimiento y los medios de represión de los menores radicalizados en suelo nacional. Adapta el arsenal criminal a los nuevos métodos de operación de los terroristas, en particular penalizando la posesión y grabación de imágenes o vídeos de crímenes yihadistas y facilitando la represión de la apología del terrorismo en las redes privadas. Por último, permite a la administración actuar con urgencia y según procedimientos adaptados y simplificados para impedir cualquier acción, prohibiendo la aparición, en particular durante los Juegos Olímpicos y Paralímpicos, en los lugares particulares expuestos a personas conocidas por los servicios de inteligencia.

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Ante el desafío del terrorismo, la mayoría senatorial siempre ha demostrado responsabilidad. Desde 2014, la Comisión de Derecho del Senado ha tomado la iniciativa de varias novedades legislativas que han permitido reforzar considerablemente nuestro arsenal criminal antiterrorista y adaptarlo a la evolución de la amenaza, respetando estrictamente las libertades individuales.

Corresponde ahora al gobierno incluir este texto en el orden del día de la Asamblea Nacional lo antes posible. La seguridad de todos está en juego. No lamentemos la inacción: dotar a las autoridades públicas de los medios adecuados para reprimir las nuevas caras de la amenaza terrorista es una prioridad para la seguridad de los franceses que debe unirnos a todos.