Francia continúa con un ritmo de descenso del 4,3% en las emisiones de gases de efecto invernadero durante el primer semestre de 2023, gracias a las reducciones realizadas en los sectores de la industria, la producción de electricidad y la construcción, mientras que la aviación continúa su recuperación post-Covid, anunció Citepa el martes.

“Las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) continuaron disminuyendo en el primer semestre de 2023, con una caída del 4,3% respecto al primer semestre de 2022 (excluidos los sumideros de carbono)”, según las preestimaciones de la organización encargada de llevar a cabo el estudio. inventario de la contaminación por carbono en Francia. Sólo en el primer trimestre, la caída fue también del 4,3% respecto a 2022, indica Citepa, que revisó al alza su estimación inicial del 4,2%. Observada desde 2018, “la tendencia general de caída de las emisiones continúa”, subraya Citepa.

Entre 2022 y 2021, la caída de las emisiones fue del 2,7% en un año. Pero para alcanzar los objetivos de Francia, es decir, una reducción del 55% de las emisiones de aquí a 2030 con respecto a 1990, debemos «ir el doble de rápido», reafirmó el presidente Emmanuel Macron a finales de septiembre. Durante el primer semestre de 2023, “tres sectores contribuyen más a este descenso”, señala Citepa: “la industria (-10%), la producción de energía (-8%) y la construcción (-7%)”.

«En el caso de los edificios, la caída de las emisiones de calefacción fue muy fuerte a finales de 2022, con el efecto de un aumento de los precios de la energía» y «a principios de 2023, este efecto continúa» a pesar de un final de invierno más severo, anuncia Citepa. Las emisiones provocadas por “la calefacción residencial (…) cayeron un 8%, con una caída del consumo de gas natural” en el primer semestre. En el lado industrial, el sector «también debió verse fuertemente afectado por la crisis energética», con las emisiones de la metalurgia ferrosa cayendo un 22% durante el período. En cuanto a la energía, el descenso se debe a la producción de electricidad libre de carbono: esto ha reducido sus emisiones en un 15%, en particular gracias a “un aumento del 2,6% en la producción nuclear”, teniendo en cuenta la vuelta gradual al servicio de reactores “y menor producción de centrales térmicas (-17%)”.

El transporte por carretera, tras dos años de recuperación post-Covid, vuelve a una senda descendente, con un retroceso del 1,5% en el primer semestre. “Por otro lado, el repunte poscrisis del transporte aéreo aún continúa, con un aumento del 25% en las emisiones de los vuelos nacionales en el primer semestre de 2023 respecto al primer semestre de 2022; y un aumento del 34% para los vuelos internacionales”, subraya Citepa.